Mensaje del Director:
Fidelidad. Algo que el mundo rechaza sin concederle valor. Cada época del desarrollo de la humanidad se conoce por sus prácticas, valores vivencias y hechos trascendentes, que cambiaron costumbres. Podemos generalmente dividirla en cinco etapas generales. Aunque cada una de ellas encierra, una o varias subetapas. La Prehistoria. la edad Antigua, la edad Media o Feudal, la edad Moderna y la edad Contemporánea o actual. Personalmente agregaría al grupo; la llamada Postmodernidad aunque no sea una etapa. Reconozco que no soy Antropólogo, Arqueólogo, ni siquiera un buen historiador. Espero sepan perdonarme si cometo algunos errores. Nadie es perfecto y por supuesto tampoco lo soy. Mencioné a la Postmodernidad, porque coloca el interés individual por sobre el interés general. Eso es algo que se vive actualmente y en lo que deseo enfocarme.
Fidelidad ya no es una virtud.
Tanto el hombre como la mujer de hoy, privilegian otras cosas por cuanto el interés es personal. Poco importa cómo viven y piensan los demás. La fidelidad es una estrecha cornisa, que pocos eligen recorrer. Lo que importa es ser feliz, sentirse bien y tener y consumir lo que plazca. No existen barreras cuando todos esgrimen y reclaman tener derechos, pero no acatamiento. Así proliferan hoy, conductas que en otro tiempo eran rechazadas como inmorales por la mayoría. Olvidan conscientemente, que lo que hoy es común no resulta necesariamente ser bueno y mejor. Y que habrá consecuencias actuales, futuras y eternas. Quien decida ser fiel en todas las áreas de su vida, tendrá que aprender a decir que no. Y además soportar el rechazo las burlas y persecuciones todo el tiempo.
Fidelidad, una faceta de la personalidad.
Quienes vivimos en América, sabemos por nuestros antepasados, qué si hoy gozamos con ciertas libertades, fue por sacrifico de muchos. Gente que luchó y en ocasiones murió en defensa de un ideal. Personas que fueron fieles a una idea en circunstancias muchas veces desfavorables, pero su fidelidad a la causa nunca declinó. Varios ni siquiera conocieron a Dios. Pero en el acierto o el error fueron fieles con su pensamiento y conducta. Hoy noto con tristeza que muchos fácilmente dejan de lado creencias y conductas que hacían la diferencia. Basta un aumento de sueldo, ascenso o colocación para perder la línea de honestidad y fidelidad que vivían. Qué de aquellos y aquellas, que sin cortapisas eligieron ser infieles a su conyugue, su patrón, sus amigos. Optan por vivir y hacer las cosas de cualquier forma, dejando de lado que habrá consecuencias.
¿Quién continúa siendo fiel?
La Iglesia, el baluarte creado por Jesús para preparar a sus discípulos lejos de la mundanalidad sufre invasiones del mundo. No se trata de doctrina, la palabra sigue siendo como antaño la misma, puesto que Dios no cambió. Pero las costumbres del mundo, han corrompido a muchos creyentes y lograron hacer tambalear sus creencias. ¿Cómo es posible que quienes manifestaron ser fieles a Jesús cuando se bautizaron, hoy lo nieguen? Manifiestan creer en la reencarnación, aceptan la interrupción del embarazo, la llamada diversidad. y tantas otras cosas. Como participar con obras de las tinieblas, cuando Pablo dijo que deben ser reprendidas. Yo no participo afirman, solo trabajo para ellas y además oro y las unjo. Algo como, yo no participo del Halloween, solo hago el agujero en la calabaza. Eso entienden como no participar. ¿Es una broma? La recompensa de la infidelidad para con Dios, solo se recibirá en el infierno. Triste ganancia y horrible destino. Por favor, despierta Iglesia, Dios sigue siendo fiel.